jueves, 24 de febrero de 2011

Amores platónicos: tod@s tenemos uno

Recuerdo que, cuando todo empezó a cambiar (una vez superado "el primer día del resto de mi vida") y empecé a asumir que realmente era lesbiana, me hice una lista mental de chicas a las que consideraba "guapas". Mi propósito era pensar en ella e imaginarme besándolas. Si me daba demasiado asco entonces significaría que no lo era. No funcionó demasiado bien el plan por culpa de dos nombres de esa lista. Una era "la pelirroja", ya os hablaré algún día de ella. La otra era Ka.

Ka realmente no se llama Ka. Ni la llaman Ka, así que sustituid Ka por el nombre que más se repita en vuestra clase. Seguro que alguien acertará.

Ka y yo éramos amiguísimas con cinco años, y con ocho, y con doce. Luego llegó esa etapa de prepubertad en que las chicas se dividen el "las populares" y la resta de mortales, lo que abrió un abismo entre nosotras al que ni nos hablábamos. Y cuando mi generación empezó a superar ese odio irracional y mortal de grupo contra grupo, nos pusieron en la misma clase.

La historia es que esta chica es, sino perfecta, casi. Y el año pasado estaba ella sentada a mi lado en clase y nos pasábamos las horas hablando. Recuerdo que hacia mayo (cuando E1 estaba por allí en mi cabeza ya) el profesor de matemáticas nos pasó un power point a lo largo de un montón de clases. Apagaba la luz y se ponía a hablar monótonamente. Ka y yo, en la última fila, nos poníamos juntas, rozándonos las cabezas, sintiendo la respiración de la otra, y nos explicábamos la vida entre risas mientras hacíamos ver que tomábamos apuntes. Y yo, si no tenía a E1 o una paranoia mortal en la cabeza sobre lo que está bien y lo que está mal, me planteaba como sería besarla a ella (en aquel momento mi imaginación se sobresaturaba solo pensando en besar a una tía). Una vez me dijo que la relajaba que le dibujasen cosas en la mano. Me pasé horas dibujando con un dedo entre sus manos.

E1 cobró importancia, acabé saliendo con ella y dejando a Ka como una amiga más. Pero cuando en verano las cosas empezaron a ponerse feas con E1 empecé de nuevo a pensar en Ka e incluso le mandé algún sms (pensando en mi interior "ahí te pudras, E1").

Y así empezó el curso, sin E1, y le conté a Ka mi história de verano, y empezamos a volver juntas del insti a la salida algunos días. Y empecé a quedarme con su cara en la cabeza, con su facebook en sugerencias de internet y con su mirada entre los pasillos. Y hubo momentos en que se metió peligrosamente dentro de mi.

Un mediodía me acompaña a casa, hablamos como si fuéramos las mejores amigas y luego, en dos semanas, nos cruzamos por el colegio y las dos desviamos la mirada incómodas, no nos hablamos, no nos decimos nada. De nuevo salimos juntas del insti, de nuevo hablamos la vida y media, de nuevo nos evitamos las dos semanas siguientes.

Y así estamos, y así yo he decidido que me la quito de la cabeza. Seguirá acelerándome el corazón cada vez que me diga qe si subimos juntas, seguirá escapándoseme un pedacito de sonrisa cuando la vea entrar de imprevisto en una clase, seguiré pensando a veces en ella. Pero, por perfectísima que sea esta chica, si quiere algo que venga ella, porque yo ya me he cansado de esperar.

Ka es ese amor imposible que tiene toda lesbiana, esa chica hetero con la que puedo haber algo pero nunca llegaste a averiguar si era tu imaginación solo o si realmente existía alguna posibilidad. Yo la condeno al destierro sabiendo que siempre me mirará desde lejos. Y a ver si algún día alguna no tan perfecta y no tan hetero se mete en mi cabeza igual que lo hizo ella.

pd: siempre dije que se parecía a Blake Lively. Y aunque no sea así... yo aquí os la dejo.

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